miércoles, 23 de julio de 2014

información para la entrevista con Miguel Bañuls


Miguel Bañuls. Madrid, 1969. Este artista pertenece a una saga de escultores y artistas muy importante para Alicante. Algo que además de un privilegio también supone un gran peso y responsabilidad. Ya que como todos los artistas, Miguel además de tener que estudiar los conceptos y la complejidad de visiones y técnicas que se han desarrollado a lo largo de la historia del arte, desde la perspectiva contemporánea, él ha vivido parte de esta historia en su ámbito familiar. Por lo que su interpretación y consecuente trasgresión supone, si cabe, una decisión más comprometida. Miguel es sobrino nieto de Daniel Bañuls y biznieto de Vicente Bañuls, los dos escultores más famosos que ha dado el siglo XIX y primera mitad del XX en Alicante, cuyas obras forman parte del paisaje urbano de muchas ciudades y pueblos de esta provincia. Inevitable la plaza de los Luceros como el principal referente de su capital. Una de las características esenciales en la obra de Miguel Bañuls es la de conocer las bases de la escultura, desde el modelado de la forma figurativa hasta la concepción geométrica y más abstracta. La experiencia y el oficio desarrollados en el empleo de todo tipo de materiales y técnicas, desde la soldadura, la forja, la fundición, el modelado…, le han aportado un gran conocimiento y dominio de los diferentes registros prácticos de cualquier tipo de estructura o volumen. Un mundo de formas y sus distintos lenguajes que se manifiestan tanto en la escultura de grandes dimensiones como en el diseño de joyas o incluso en la creación de elementos arquitectónicos funcionales. Viajando así con las formas desde la dimensión del espacio arquitectónico, escultórico, a la concreción mínima de la joya. Con estas bases conceptuales y técnicas, en esta exposición que planteamos en la Lonja, Gravedad Cero, Miguel ha buscado en materiales contemporáneos, como el PVC y el metacrilato, jugar con dos aspectos fundamentales de la escultura del siglo XX y XXI, la tensión y la pérdida de peso. Materiales flexibles con los que, en el ensamblaje de las formas recortadas y tensionadas, crea el juego de líneas que define el espacio. Miguel nos introduce físicamente en una visión de las formas a través del material transparente, impreso en parte con una trama de líneas paralelas, que refuerza esa dimensión de dibujo en el aire. La viabilidad de las formas se consigue con un tensado de una u otra parte de la estructura dando lugar a arcos más cerrados o abiertos. Siendo en origen un dibujo o esquema que al tirar de él con diferente tensión coge volumen y cuerpo. Y así el juego se hace infinito.
                                                          Comisarios: Eduardo Lastres y Guillermina Perales.

martes, 22 de julio de 2014

sobre Gravedad Cero, Miguel Bañuls.



os pasamos los textos de la expo Gravedad Cero para la entrevista con Miguel Bañuls este viernes.


Miguel Bañuls. Madrid, 1969. Este artista pertenece a una saga de escultores y artistas muy importante para Alicante. Algo que además de un privilegio también supone un gran peso y responsabilidad. Ya que como todos los artistas, Miguel además de tener que estudiar los conceptos y la complejidad de visiones y técnicas que se han desarrollado a lo largo de la historia del arte, desde la perspectiva contemporánea, él ha vivido parte de esta historia en su ámbito familiar. Por lo que su interpretación y consecuente trasgresión supone, si cabe, una decisión más comprometida. Miguel es sobrino nieto de Daniel Bañuls y biznieto de Vicente Bañuls, los dos escultores más famosos que ha dado el siglo XIX y primera mitad del XX en Alicante, cuyas obras forman parte del paisaje urbano de muchas ciudades y pueblos de esta provincia. Inevitable la plaza de los Luceros como el principal referente de su capital. Una de las características esenciales en la obra de Miguel Bañuls es la de conocer las bases de la escultura, desde el modelado de la forma figurativa hasta la concepción geométrica y más abstracta. La experiencia y el oficio desarrollados en el empleo de todo tipo de materiales y técnicas, desde la soldadura, la forja, la fundición, el modelado…, le han aportado un gran conocimiento y dominio de los diferentes registros prácticos de cualquier tipo de estructura o volumen. Un mundo de formas y sus distintos lenguajes que se manifiestan tanto en la escultura de grandes dimensiones como en el diseño de joyas o incluso en la creación de elementos arquitectónicos funcionales. Viajando así con las formas desde la dimensión del espacio arquitectónico, escultórico, a la concreción mínima de la joya. Con estas bases conceptuales y técnicas, en esta exposición que planteamos en la Lonja, Gravedad Cero, Miguel ha buscado en materiales contemporáneos, como el PVC y el metacrilato, jugar con dos aspectos fundamentales de la escultura del siglo XX y XXI, la tensión y la pérdida de peso. Materiales flexibles con los que, en el ensamblaje de las formas recortadas y tensionadas, crea el juego de líneas que define el espacio. Miguel nos introduce físicamente en una visión de las formas a través del material transparente, impreso en parte con una trama de líneas paralelas, que refuerza esa dimensión de dibujo en el aire. La viabilidad de las formas se consigue con un tensado de una u otra parte de la estructura dando lugar a arcos más cerrados o abiertos. Siendo en origen un dibujo o esquema que al tirar de él con diferente tensión coge volumen y cuerpo. Y así el juego se hace infinito.
                                                          Comisarios: Eduardo Lastres y Guillermina Perales.


GRAVEDAD CERO. ARTE ÚLTIMO 21 DÍAS.
Miguel Bañuls. Madrid, 1969.
Este artista pertenece a una saga de escultores y artistas muy importante para Alicante. Algo que además de un privilegio también supone un gran peso y responsabilidad. Ya que como todos los artistas, Miguel además de tener que estudiar los conceptos y la complejidad de visiones y técnicas que se han desarrollado a lo largo de la historia del arte, desde la perspectiva contemporánea, él ha vivido parte de esta historia en su ámbito familiar. Por lo que su interpretación y consecuente trasgresión supone, si cabe, una decisión más comprometida. Miguel es sobrino nieto de Daniel Bañuls y biznieto de Vicente Bañuls, los dos escultores más famosos que ha dado el siglo XIX y primera mitad del XX en Alicante, cuyas obras forman parte del paisaje urbano de muchas ciudades y pueblos de esta provincia. Inevitable la plaza de los Caballos como el principal referente de su capital. Miguel Bañuls entiende, por transmisión familiar, la vida y la economía de un taller de escultura, en el que cualquier elemento puede tener una función. El estudio de la forma, del volumen, del espacio, de las técnicas y los materiales, le lleva a interesarse también por el diseño y, como leal heredero de la escultura en piedra u hormigón, por la restauración. Se forma en esta multiplicidad que consolida con sus estudios en la Escuela de Bellas Artes de Madrid, escuela que sobre todo en escultura mantiene una tradición figurativa muy fuerte. Y aunque se han dado casos de artistas que han derivado hacia la abstracción, la formación académica mantiene una fuerte vigencia con la figuración. En Madrid, trabaja varios años en el estudio de escultura Glyptos, adquiriendo amplios conocimientos sobre el modelado, vaciado y fundición, realizando también diversos trabajos de restauración. Una de las características esenciales en la obra de Miguel Bañuls es la de conocer las bases de la escultura, desde el modelado de la forma figurativa hasta la concepción geométrica y más abstracta. La experiencia y el oficio desarrollados en el empleo de todo tipo de materiales y técnicas, desde la soldadura, la forja, la fundición, el modelado…, le ha aportado un gran conocimiento y dominio de los diferentes registros prácticos de cualquier tipo de estructura o volumen. Un mundo de formas y sus distintos lenguajes que se manifiestan tanto en la escultura de grandes dimensiones como en el diseño de joyas o incluso en la creación de elementos arquitectónicos funcionales. Viajando así con las formas desde la dimensión del espacio arquitectónico, escultórico, a la concreción mínima de la joya. Con estos materiales conceptuales y técnicos, Miguel se traslada a Alicante donde abre taller en el mismo edificio donde estuvieron sus antepasados, y comienza una carrera artística dentro de los ámbitos de la figuración, pero también de la geometría, de la abstracción y del diseño, recogiendo la tradición propia de esta ciudad, con escultores como Eusebio Sempere, Eduardo Lastres….
En esta exposición que planteamos en la Lonja, Gravedad Cero, Miguel ha buscado en materiales contemporáneos, como el PVC y el metacrilato impreso, jugar con dos aspectos fundamentales de la escultura del siglo XX y XXI, la tensión y la pérdida de peso. Materiales flexibles con los que en el ensamblaje de las formas recortadas y tensionadas se crea el juego de líneas que define el espacio. Miguel plantea una visión espacial de las formas a través del material transparente, impreso en parte con una trama de líneas paralelas, que refuerza esa dimensión de dibujo en el espacio. La viabilidad de las formas se consigue con un tensado de una u otra parte de la estructura dando lugar a formas más cerradas o abiertas en círculos y arcos. Siendo en origen un dibujo que volvería a su plenitud si dejáramos de ejercer esa tensión. Todo se reduce a estructuras planas, a un dibujo o esquema que al volver a tirar de él por diferentes partes y con diferente tensión vuelve a coger el volumen del espacio, y las formas son infinitas.
A principios del XX, los hermanos Naum Gabo y Pevsner, recogiendo la apertura a nuevos materiales en la escultura que propiciara el cubismo de Picasso, ya practicaron sobre el plexiglás, creando estructuras con algunas referencias figurativas a rostros. Un material transparente o negro o blanco que utilizaron para modular el espacio escultórico, desarticulando la idea de la escultura que parte del bloque, buscando otro tipo de referencia conceptual, que también habían investigado escultores como Pablo Gargallo y Julio González, pero con el empleo de laminas de hierro o de bronce. Miguel reinterpreta esa idea de la transparencia, con un material fácilmente maleable, que puede ser a su vez intervenido pictóricamente, con su tintado en negro, creando un efecto modular por medio de líneas o formas concretas, rectángulos…. La presencia de la gráfica es importante en la escultura a partir de la segunda mitad del XX, Kosuth en sus vidrios...
Miguel Bañuls nos plantea una mirada hacia la escultura a través de los recursos visuales de la transparencia y la superposición de diferentes planos, construidos o  simplemente sugeridos a base de líneas. El espectador recibe la sensación del espacio dominado por un conjunto de líneas y formas que se entrecruzan. Y una comprensión del espacio a través de su propio cuerpo al pasear entre el espacio construido por las formas, sin barreras. Un ejercicio visual, físico, que plantea el principal sentido de la escultura, es decir, la ocupación del espacio total y su visión global. La instalación de las formas en el espacio, el juego del entrecruzamiento de las líneas, está provocado por el movimiento del espectador, no hay nada que se lo impida, realmente se le está provocando, porque el espacio creado tiene la dimensión humana. El entrecruzamiento producido por la acción visual y física del espectador al pasear alrededor de la obra da esa sensación de corporeidad casi intangible, aunque parezca que unimos dos conceptos antagónicos, corporeidad e intangible.
Miguel Bañuls nos plantea una revisión del constructivismo. Sus esculturas están colgadas, no reposan en el suelo, incitando a la posibilidad de movimiento. O la escultura se mueve o se mueve el espectador. En sus obras apreciamos las diferentes influencias, en las cuales un cambio de material, del opaco y brillante metal al transparente plástico, plantea nuevas visiones, cambia totalmente el esquema. La transparencia posibilita una visión diferente, y el movimiento alrededor de la pieza, desde la accesibilidad de la transparencia, permite un juego diferente al que se establece con un material opaco, que oculta. Como buen escultor, el conocimiento de muchas técnicas y materiales, le posibilita el poder elegir el lenguaje, el material para encontrar los efectos deseados, dependiendo de lo que quiera decir. El dibujo en el espacio, el engaño de la gravedad, la tensión sobre el material transparente, casi hecho de aire, nos introduce en el espacio, en la dimensión de la escultura, de la arquitectura contemporánea.

                                                          Comisarios: Eduardo Lastres y Guillermina Perales.



Miguel Bañuls Maciá.
C/ Aureliano Ibarra 9, Alicante 03009

www.miguelbañuls.com
www.facebook.com/miguelbanyuls



VIERNES 25 A LAS 20H, entrevista con el artista Miguel Bañuls y los comisarios de Arte Último, Eduardo Lastres y Guillermina Peraless